METODOLOGÍA |
Generalmente, se reúne un grupo de personas. Aquella que lo solicita expone brevemente su tema, a poder ser en una sola frase. Entonces, muchas veces, se pide a quien ha solicitado trabajar que se ubique en el espacio y se represente a sí mismo, es decir, que se deje sentir y llevar por los movimientos que le surjan. Otras veces se elige un miembro del grupo para representarlo. También puede ser que de entre los integrantes del grupo, se añadan representantes para algunos miembros de su sistema. Puede que sean necesarias muchas personas o solamente una. En ese momento la constelación cobra vida. Aparecen movimientos que sacan a la luz la dinámica que envuelve a la persona o la situación. Así se puede dar espacio a un nuevo movimiento que completa aquello que estaba interrumpido y restaure el amor y el equilibrio. Tomar lo que es, tal y como es. A diferencia de los movimientos que tienen lugar en el nivel de la conciencia familiar, donde hay una necesidad de compensar en una continuación interminable de intentos, los nuevos movimientos pueden, de alguna manera, elevarnos a otro nivel, donde la influencia de la conciencia familiar se detiene, donde la necesidad de reparación, de expiación, termina. Siempre llevan al amor, un amor volcado hacia todos sin discriminación, reconciliado y unido con lo que anteriormente le estaba confrontado. Un movimiento que va más allá, y justamente por ir más allá, tiene futuro y permanece. Las Constelaciones también se pueden realizar individualmente. |
"Cuando estamos buscando una solución a menudo tenemos una idea de cual podría ser. Hay situaciones en que esta imagen interior es correcta y se obtiene un buen resultado de ella. Pero no siempre es posible. Aún así existe un movimiento. Cuando el movimiento sale a la luz y no es manipulado, de modo que permanece sin que se cambie nada, la fuerza del mismo es mucho mayor que si nos empeƱásemos en buscar una solución."